Melena de León (Hericium Erinaceus)

Es una seta con forma de coral o anémona, y de textura delicada pero tenaz. Se puede cortar longitudinalmente para saltearse o hacerse a la plancha. Es muy sensible al tacto, y debe comercializarse siempre envasada para evitar el contacto directo con los dedos hasta su consumo. Está indicada para temperaturas medias. En Estados Unidos y Asia alcanza altísimos valores en el mercado, y en Europa casi ni se la conoce, por lo que su precio de entrada en este mercado y en el nacional puede ser muy alto. Será una de las setas más valoradas en el mercado en los próximos años. Es una seta que alcanza precios por encima de los 20 €/kg si la vendemos directamente a hostelería.

Tabla de contenidos

Precio de venta, pedido mínimo y tiempo de elaboración:

Consulta estos datos en la ficha de cada seta dentro de nuestro Catálogo de sustratos y especies de cultivo.

Rendimientos productivos para bolsa de 5-5,5 kg esterilizada:

  • Primera floración: 750 g – 1.100 g
  • Segunda floración: 300 g – 700 g 

Rangos de cultivo:

  • Temperatura de fructificación:                  12 – 23 grados centígrados.
  • Temperatura ÓPTIMA:                  14 – 20 grados centígrados.
  • Humedad relativa ambiental:                     85 – 95%.
  • Nivel de renovaciones del aire:                 Medio. Se especifica más abajo según estilo de cultivo.
  • Nivel de iluminación:                                  Bajo – medio. Puntos de luz y potencia según planificación.
  • Aparición de los primordios:                       3 – 5 días.
  • Crecimiento de las setas:                            4 – 5 días.
  • Descanso entre floraciones:                       12 – 16 días.

¿Cómo utilizar nuestras bolsas de Melena de León?

1- En primer lugar, te recomendamos aprender las formas de manejar y abrir nuestras bolsas pulsando aquí.

2- Una vez recibas las bolsas de Melena de León, coloca los bloques de sustrato sobre sus bases en las baldas de tus estanterías o en el suelo. También puedes colocarlas horizontalmente en forma de «muro». Puedes colocar las bolsas totalmente pegadas unas a otras sin ningún problema, ya que apenas generarán calor entre ellas. Esta especie es agresiva, y le gusta fructificar sus setas por todas las superficies interiores de la bolsa en busca de la luz, por lo que colocarlas muy juntas hará que se reduzca el número de primordios «in vitro» y el resto crezcan hacia arriba.

3- Abre las bolsas y retírales todo el micelio aéreo que encuentres sobre sus paredes interiores o sobre la superficie del sustrato. Retíralo delicadamente sin llevarte con él parte del sustrato. Comprueba que efectivamente se trata de micelio aéreo y no de una masa densa y temprana de primordios creciendo sobre la superficie superior del sustrato. Puedes aprender más sobre este factor de crecimiento en nuestro apartado: problemas y preguntas frecuentes.

4- Esta seta crece haciendo brotar un gran número de primordios individuales (diminutas masas de micelio que irán engrosándose hasta formar unas pequeñas «canicas» blanquecinas) por toda la extensión del sustrato expuesta al aire ambiental, y para maximizar su producción recomendamos intentar fructificarlas maximizando esta superficie. Para ello, lo más conveniente si disponemos de una alta humedad ambiental en la sala de fructificación es abrir las bolsas completamente por su parte superior (primera y segunda forma). Aunque también brotan sin problemas recortando un pequeño círculo de 2-3 cm de diámetro en la propia bolsa (tercera forma) o realizándole un pequeño corte en un lateral (cuarta forma). Por otra parte, sería bastante sencillo controlar las condiciones ambientales de alta humedad y oxigenación necesarias con los primordios de esta seta si abriéramos las bolsas estirándolas completamente hacia arriba (quinta forma). Si fructificamos las bolsas de esta última forma obtendremos un buen número de primordios que crecerán en abundancia y de manera independiente, llegando a fusionarse en una o varias grandes «bolas» con el paso de las horas o días – esto es muy frecuente en esta especie. Recuerda que para que los sustratos y las setas no se sequen deberás mantener una humedad relativa ambiental alta y óptima (ver valores arriba).

5- A la Melena de León le gusta crecer en un ambiente de niebla y penumbra, aunque crecerá en cualquier ambiente con una humedad superior al 85-90% y una temperatura apropiada. Para ello es muy favorable un riego controlado por micro nebulización o ultrasonidos, siempre sin mojar (crear gotas a la vista) los sustratos o las setas, ya que de forma contraria podríamos arruinar el cultivo. ¿Significa esto que si no hay «niebla» en la sala no me saldrán las setas? Ni mucho menos, pero la aparición de sus primordios se ve muy afectada por todos los factores que aquí explicamos, así que en caso contrario controla bien sus parámetros de cultivo, la higiene y la limpieza de la sala.

6 – Cuando los filamentos o «tentáculos» de esta seta comiencen a alargarse hasta llegar a una forma que recuerda a un coral o «melena», y antes de que éstos empiecen a secarse, estriarse o amarillearse, deberán recolectarse las setas retorciendo o girando la base de sus tallos para soltarlos del sustrato, con cuidado de dañar o fragmentar a este último lo menos posible. Los filamentos o «tentáculos» de esta seta son muy sensibles al tacto (llegando a oscurecer levemente la superficie afectada), por lo que recomendamos tener mucho cuidado durante la recolección y el envasado de esta seta, evitando todo roce prolongado con cualquier superficie o recipiente. No recomendamos cortar los racimos o los tallos de esta especie utilizando tijeras o cuchillos, ya que los restos que queden adheridos al sustrato serán un nuevo foco de contaminación conforme pasen los días. La esporada de esta seta es blanca, y suele ser bastante reducida si se recolecta en un punto de maduración apropiado.

7- La segunda floración de esta seta suele ser más tardía y escasa. Debemos mantener los sustratos a una humedad que nunca baje del 80% para evitar que se sequen el tiempo que se encuentren recuperándose entre floradas, ya que durante este periodo de descanso se encontrarán «desnudos» y expuestos al aire (y contaminaciones) de la sala. Para ello resulta muy conveniente volver a estirar las bolsas hacia arriba estrechando sus bocas, de modo que solo quede una apertura superior de un par de centímetros de diámetro (los suficientes para que el sustrato pueda respirar durante este tiempo de descanso). También se deben cerrar (cubrir) con cinta adhesiva (preferiblemente transparente) todas las incisiones laterales o inferiores que se le hayan practicado a las bolsas de sustrato si este hubiera sido el método de fructificación elegido.

8- Accede a nuestro apartado de «sustratos» para adelantarte a cualquier eventualidad, consulta bibliografía especializada y de calidad demostrada, habla con productores expertos, gana experiencia y aprende todo lo que puedas sobre el cultivo de las especies de setas que quieras producir.

Problemas frecuentes que puedes experimentar al cultivar esta seta:

Accede al siguiente enlace para comprobarlos.

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